sábado, 2 de junio de 2012

Rompiendo la crisálida



Te observo, completamente absorta en todas esas cosas que tanto te gusta hacer. Casi nunca te das cuenta, pero siempre te observo, hace ya varios años que se ha convertido en la mejor de mis aficiones.

He cambiado el patrón racional de mis sentidos para aprender a conocerte, tu forma de ser activa mi corazón y, simplemente observándote, descubro todo aquello que quieres ocultar al mundo.

Yo he tenido al mejor de los maestros, el tiempo.

Tú intentas ocultarlo, constantemente, pero una vez cada lustro te es imposible, mantienes el techo sobre tus hombros mientras tu piernas flojean y es ese tremendo esfuerzo el que descubre el basto telón que siempre lo oculta todo.

Aparentas fuerte, la mujer más fuerte que nadie haya conocido jamás, feliz, como la carcajada de un niño, me encanta tu sonrisa, todo en tu mundo parece perfecto, pero no me engañas, porque te observo, mis ojos me advierten, piensas lo mismo que cuando te conocí y sólo eras una niña, indefensa en un cuerpo de mujer. No te das cuenta de que siempre te has equivocado, enormemente, eres una mariposa que se empeña en ser gusano... y, en realidad, eres la persona fuerte, feliz y perfecta que llevas en tu coraza.

Y si no me crees, sólo tienes que observarte.

viernes, 20 de abril de 2012

El faro de Cavo Home


Unidas por un beso permanente
La costa con las olas en el mar
No hay forma de quedar indiferente
Ante ese abrazo inmenso que se dan

Igual que una pareja enamorada
Se envuelven  en espuma bajo el sol
Y siempre un fiel testigo los observa
Con luz entrecortada entre tinieblas
De las noches de niebla y de sudor

Guiando al marinero que se acerca
Remando hacia la costa sin aliento
Curtido por las olas, por el viento
Cansado y satisfecho por la pesca

Sereno remanso


                                                   
Remanso en la aldea, suspiros del alma
Recuerdos de niño, los peces, las cañas
Las aguas tan frescas, las casas tan blancas
Cantaban los grillos croaban las ranas

Espejo tranquilo, remanso en la aldea
Recuerdos profundos, besos de la abuela
Siento en las mejillas sus dulces caricias
Dulzuras de viejos que eran mis delicias 

bodegón



Son tiempos modernos, vivimos de prisa
Los frigos, las vitros, las teles de plasma
Para las señoras hay  grandes inventos
Robots de limpieza, las aspiradoras.

La tecnología nos llena de nada
Vuelven los recuerdos de tiempos más duros
Jarrones de cobre, colchones de lana
Cocinas de leña, candil de carburo

Remiendos, zurcidos, ropa en el  clareo
Lavar en el rio ropa de trabajo
Potes, fiambreras en el fregadero
Fregar con arena o con estropajo.

Eran tiempos duros con menos mentiras
Los hombres más rudos con manos más limpias
Muy poco dinero, grande las familias
Cuentos del abuelo, juego de la pita

Me planto me llega, no quiero el progreso
Políticos, bancos, desahucios, rescates
La prima de riesgo, recortes, patrañas
Mentiras, abusos, rio de pirañas